Acabo de hablar con vos, y ahora no quiero hablar con nadie. Conste, pues, que no es porque piense que dije todas las palabras necesarias con vos, sino porque se me han quedado atoradas todas en el gaznate. Te quiero, iba a decir antes de colgar. Pero aposté por “Un abracito”. Yo sé, imbécil que soy, que es mejor así. Quisiera quererte de verdad para de verdad decirte lo que pienso, pero me das miedo. Me llenás el pecho de miedo. Antes el miedo se iba aspirándolo. Ahora que yo he decidido que nada hay por aspirar, el miedo se atora entre el viento y el aire. Iba a decirte que te quiero. No que te quise, o que quisiera quererte. Iba a decir Te quiero. Con mayúsculas. Con fe y devoción ciega a mis maltratos emocionales. Esos me valieron tanto. Ahora soy más fuerte. Pero si sólo te escucho, si sólo te escucho respirar del otro lado del teléfono me convierto en una medusa. Débil, frágil y baboso.
4 jul 2010
fragmento 1
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
6 comentarios:
Identificada como q mis pensamientos hubieran escrito saludos!
simplemente me Encanta tu forma de escribir...
Congrats!
Creo que muchos nos sentimos identificados con ella...
Saluditos
Dios mioo!! como podes plasmar tan bien lo q pensas!? me impactas! nitido...
Dios mioo!! como podes plasmar tan bien lo q pensas!? me impactas! nitido...
una medusa, un río... ahora todo tiene sentido! me encantó!
increíble...
cm todos los seres humanos podemos llegar a sentir lo mismo...
quisiera que alguien lea esto... que expreso lo que siento por el...
lamentablemente sigo teniendo miedo
Publicar un comentario