1 sept 2009

Hoy recordé la primera vez que rompí con alguien.. Cómo subió al carro rojo, y se fue sonriendo. Como diciendo Yeah, mission accomplished: I've broken a heart. Nunca ví a nadie con tanto orgullo en los ojos. Y no, jamás voy a olvidar esas palabras: No te quiero. Aún así, lloré tres días mientras me bañaba, y me limpié las cicatrices con saliva. La noche volvió a ser mía y me volví a enamorar. Esta vez, todo parecía diferente. Quiero un fuckbuddie, me dijo. Y yo accedí, sabiendo que no era que quería un fuckbuddie cualquiera: me quería a mí, si no, no me lo hubiese dicho de la forma en que lo dijo. Accedí, pues. La emoción me duró tres meses. Y el llanto, diez minutos. Agarré un par de cigarrillos, y la luna me guiñó un ojo. Tuve lo que deseaba, y ahora buscaba lo que quería. Busqué la mejor manzana, y me la comí completa. No dejé ni el centro. Engullí todo lo que pude. Todo. Y la manzana se fue, pero no me dejó. Quise morir N cantidad de veces. Lloré por días. Luego salí a caminar por la calle, y me encontré con Elphaba. Verde. Enorme y verde. Con un secreto entre las piernas. Y me enamoré de su color. Tenía algo verde sólo para mi boca. Tenía que comer todo. Y devoré hasta el último pedazo de su color. Hasta que quedó transparente. En ese momento, pude ver dentro, y todo estaba muerto. Yo mismo había matado todo con mi hambre. Que no era su culpa, y que era mi problema: el hambre. Aún así, Elphaba siguió dándome migajas, y yo seguí devorándolas. Nos desgastamos tanto encontrando grises y olvidando los demás colores que, de repente, me dejó de interesar. No le gustó mi canción = no le gusté yo. Y dejé que se fuera. Me acosté con dos o tres sin ningún miedo de quitarme la ropa. Y fui feliz 20 segundos. No me importó nada, más que olvidar. Y eso fue fácil. Siempre todo ha sido tan fácil. Siempre camino con la luna guiñándome un ojo. Con la noche, completa, entera, a mordizcos, sólo mía.

No hay comentarios: